Con Azúcar y a lo Loco: UN TRONCO DE NAVIDAD Y UN NUNCA ES TARDE

Hola a tod@s!!

Si es que aún queda alguien que visite este blog después de seis largos meses sin publicar una sola entrada, no contestar comentarios, es decir, seis meses de inactividad bloguera total.

No voy a excusarme de ninguna de las formas, porque si bien estos meses no han sido un paseo por el paraíso se que no soy la única a la que este año le ha tocado sonreír menos de lo habitual pero aún así tengo muchas cosas que agradecer a este año que acaba y me gustaría hacerlo aquí:

Este año he descubierto que no se puede dar nada por sentado, que hoy es todo perfecto y mañana nada es igual, todo se vuelve gris (o más bien negro) pero también he aprendido que la luz existe y que a veces no está tan lejos como esperabas...Gracias a 2012 por mostrarme la oscuridad y la luz y a ti mamá por mostrarme cuál es la verdadera fortaleza, por enseñarme a quererte aún más y por ser mi ejemplo a seguir, eres MI GUERRERA preferida. Por todo ello, 2012 me ha enseñado a amar el rosa, por ti mamá.

Gracias a ti cariño, que no se si leerás esto algún día pero se que sabes que te agradezco que hayas estado ahí (lo cuál a veces resulta muy complicado, porque señor@s, aquí la menda, no es ninguna santa), me has enseñado a quererte aún más y a pesar de que este año no pasará a la historia por ser el mejor de mi vida quiero que sepas que vivir contigo ha sido la mejor de las decisiones y espero que me sigas soportando y queriendo cientos de años más.

He descubierto montones de blog, no solo de repostería o cocina, también de decoración, de manualidades, de reflexiones y de como personalizar nuestro blog, este último merece mención a parte. Así que doy gracias a este año por mostrarme tantas cosas nuevas, tantas blogueras con ideas y con pensamientos positivos que tanta falta nos hacen.

He acabado 2012 renovando un poquito la imagen del blog, y esto ha sido posible gracias a un blog que se ha posicionado entre mis favoritos en muy poco tiempo tanto por su contenido como por la persona que lo escribe, este blog no es otro que Personalización de blogs, escrito por Blanca una gran mujer con grandes ideas y con un curso para diseñar tu blog en el que todo está perfectamente bien explicado, solo os digo que después de leer sus 117 paginas ¡no tuve ni una sola duda!.

Así que mi blog recibirá 2013 con un aspecto más ordenado y limpio (lo de que esté bonito o no os lo dejo a vosotr@s). No se si Blanca leerá este post, pero por sí lo hace, decirle que tanto yo como todas sus seguidoras esperamos que vuelva con más ganas que nunca porque su trabajo es muy importante para el mundo bloguero y porque ha demostrado ser una persona de carácter que no debe dejarse vencer por gente cobarde.

A 2013 solo le pido: salud para todo aquel que tiene mi cariño, encontrar mi camino, trabajar duro, motivos para sonreír, muchísimas nuevas ideas, ser más positiva, lograr perder peso, hacer más deporte, leer más, hacer las cosas con pasión e ilusión porque 2012 me ha enseñado que es la única forma de que las cosas salgan bien, seguir conservando a mis amig@s y mantener vivo este blog.

Por último a este nuevo año no le pido, le exijo que nos enseñe a ver las cosas desde la valentía y no desde el miedo y a los señores directivos de los canales de televisión les digo que las malas noticias para mi han dejado de ser noticias y que con el pesimismo se genera más pesimismo y que si todavía no se habían dado cuenta, señores míos, así no salimos de ningún sitio, eso sí, el agujero cada vez es más confortable y grande para muchos de ellos. A los políticos, que los Reyes Magos les manden un buen chorizo y que Fofito les mande un curriculum* porque creo que lo han "traspapelado".

Y como la gran mayoría de cosas que pido para 2013 dependen de mí, me pongo a ello incluso antes de que empiece este nuevo año, así que aquí os dejo una receta que me temo llegará tarde para Nochevieja pero que para Reyes será todo un acierto:

Esta receta es una mezcla de dos recetas de dos grandes blogs, Las Recetas de MJ y Kanela y Limón

INGREDIENTES:

Para el almíbar:

500 ml de agua

300 grs. de azúcar

2 cucharadas de miel

Un chorro de licor (yo utilicé ron)

Para la crema pastelera:

1l de leche

250 grs. de azúcar más tres o cuatro cucharadas de azúcar vainillado

6 yemas de huevo

80 grs. de maicena

Una vaina de vainilla

Para la ganache de chocolate con leche:

200 ml de nata para montar

200 grs. de chocolate con leche en tableta

Para el bizcocho:

4 huevos

120 grs. de azúcar

120 grs. de harina de repostería

Una pizca de cremor tártaro o bicarbonato (opcional)

Una pizca de sal

Para los champiñones de merengue:

2 claras de huevo

160 grs. de azúcar glas

Una pizca de sal

Una pizca de cremor tártaro (opcional)

Para la cobertura y decoración:

170 grs. de chocolate de cobertura

Azúcar glas

Cacao en polvo

Si de verdad habéis llegado a leer hasta aquí, diréis menuda receta más larga y complicada, pero creerme, si lo fuese yo no la habría podido elaborar ;)

ELABORACIÓN:

Empezamos preparando el almíbar:

Ponemos un cazo al fuego con el agua y el azúcar y la miel y dejamos que hierva unos 10 minutos. Apartamos de fuego, vertemos el chorrito de licor a nuestro gusto y dejamos que temple.

A continuación preparamos la crema pastelera:

Abrimos la vaina de vainilla con el filo del cuchillo y sacamos las semillas para verterlas sobre la leche que tendremos calentando excepto un vaso de la misma. En un bol vertemos las yemas y la maizena y añadimos el vaso de leche que hemos reservado y el azúcar. Batimos muy bien.

En cuanto la leche comience a hervir, añadimos poco a poco la mezcla anterior sin dejar de remover hasta que la crema espese. Retirar del fuego antes de que hierva o la crema se cortará. Pasamos la crema a otro recipiente y cubrimos inmediatamente tocando toda la superficie con papel film (así a nuestra crema no le saldrá costra). Dejamos enfriar.

Vamos con la ganache de chocolate con leche:

Vertemos en un cazo la nata y calentamos hasta que hierva, cuando esto suceda apartamos del fuego, añadimos el chocolate troceado y removemos bien hasta que esté completamente derretido. Dejamos que temple y lo metemos al frigorífico hasta que esté bien frío, será entonces cuando lo montemos con ayuda de una varillas.

Seguimos preparando el bizcocho:

Batimos los huevos con el azúcar hasta que doblen su volumen, cuando esto suceda, vamos echando poco a poco la harina (previamente tamizada) junto con la sal y el cremor tártaro o bicarbonato. Todo esto lo incorporamos con movimientos envolventes de fuera hacia dentro para evitar que la mezcla pierda volumen.

Preparamos una bandeja con papel de horno que untaremos en mantequilla y vertemos la mezcla resultante en él. Introducimos en el horno que estará precalentado a 170ºC, colocamos la bandeja en la posición de en medio y horneamos 15 minutos.

Una vez transcurrido este tiempo, sacamos del horno y volcamos dando la vuelta encima de otro papel. Retiramos el papel que lo cubre y lo enrollamos sobre sí mismo con ayuda del papel de abajo. Lo dejaremos así hasta que se enfríe (yo hice dos troncos y en uno enrollé directamente y en otro dejé enfría y luego enrollé y no aprecié diferencia alguna).

Es el momento de hacer los champiñones de merengue:

Batimos las claras con la sal y el cremor tártaro hasta que estén montadas. Añadimos el azúcar poco a poco. Una vez hemos añadido todo el azúcar, continuamos batiendo hasta que el merengue se vuelva brillante y se formen picos. Introducimos el merengue en una manga con boquilla ancha redonda y formamos los champiñones y el tronco.

Introducimos en el horno que estará precalentado a 70ºC durante una hora y cuarto (es mejor dejar la puerta del horno entreabierta). Sacamos del horno y dejamos enfriar y los comenzamos a montar. Si llevan algún pico lo limamos con un rallador de cocina.

Colocamos la parte de arriba del champiñón sobre una superficie donde se aguanten y pintamos la parte inferior con un poco de la ganache de chocolate y adherimos el tronco del champiñon.

Por último elaboramos la cobertura del tronco:

Derretimos el chocolate de cobertura en el microondas en intervalos de 30 segundos a baja potencia para que no se queme. Cuando esté completamente deshecho vertemos la mezcla sobre papel vegetal y la extendemos bien. Reservar en la nevera unos 30 minutos para que endurezca.

Como nuestro tronco estará y a más que frío, es hora del montaje final:

Desenrollamos y lo calamos con el almíbar (no calar muchísimo o se humedecerá demasiado y no nos dejará transportarlo a plato), lo rellenamos con la crema pastelera y lo enrollamos de nuevo. Cortamos un extremo de forma diagonal y lo colocamos en un lateral del tronco. Es hora de cubrir nuestro tronco con la ganache de chocolate con leche.

Cuando esté bien cubierto sacamos de la nevera el chocolate de cobertura que ya habrá solidificado y lo rompemos bruscamente y vamos cubriendo el tronco con esos trozos.

Colocamos las setas y espolvoreamos azúcar glas (utilizamos para ello un colador) por el tronco y cacao por encima de las setas.